A estas alturas ya hay muy pocas personas que desconozcan qué es un “escape room” o, como diríamos en España, una habitación de escape. Se trata, básicamente, de una habitación sellada cuya apertura sólo encontrarás si descifras todos los enigmas que ella esconde. En otras palabras, es un juego de escape en vivo al que muchos españoles, sobretodo millennials, ya son adeptos. Ahora bien, ¿es posible que este concepto llegue hasta el nivel educativo? Pues al parecer, ya lo ha hecho.
Según ScolarTIC, plataforma para docentes impulsada por Telefónica Educación Digital, este tipo de juego educativo ayudará a potenciar y visibilizar las diferentes habilidades de cada alumno. Para empezar, las pruebas (adaptas a la etapa escolar) que deberán pasar los alumnos obligarán a los mismos a trabajar en equipo y desenmarañar el razonamiento lógico-matemático, el pensamiento crítico, y la creatividad, nuevas metodologías que además son cada vez más importantes en el aula pues se ha demostrado que facilitan al alumno un aprendizaje más activo y significativo.
Clue Hunter Valencia ya ha reaccionado a la iniciativa y nos ha asegurado que adaptando las aventuras y experiencias a la edad de los participantes se podrían crear juegos de escape educativos realmente interesantes a nivel escolar.
Aprender Jugando
No obstante, ScolarTIC no es pionera en esto, ya que un colegio de Soria ya ha implantado esta actividad entre sus escolares. En el Colegio Nuestra Señora del Pilar Escolapios de Soria las nuevas metodologías son una realidad desde hace tiempo y el trabajo por proyectos ya es su compañero habitual. Ahora suman un proyecto en el que la gamificación y el juego trasladan a los alumnos al Antiguo Egipto y aprenden conocimientos, obtienen habilidades y competencias gracias a los «Cazadores de tumbas», un juego de escape en el que los alumnos aprenden jugando.
Cuando empieza el juego, se enciende un monitor en el que una grabación les explica la situación y les plantea su misión como «Cazadores de tumbas». En 45 minutos deben juntar las partes de un oráculo dividido en fragmentos localizados en las cajas. Si no consiguen abrir todas las cajas y juntar todos los fragmentos, la Maldición de Abu Simbel caerá sobre toda la Humanidad.
Se trata de una interesante iniciativa en la que muchos profesionales de la educación han fijado la atención. ¿Estaremos ante la chispa que hará estallar un nuevo modelo educacional en España?
Cuidado a los peligros
Ahora bien, no debemos olvidar que este tipo de actividades deben estar supervisadas por verdaderos profesionales, y no hablo solo del ámbito estudiantil, sino en general, ya que el hecho de encerrarse en una habitación puede llegar a ser peligroso si no se toman medidas preventivas. De hecho, cinco adolescentes perdieron la vida recientemente en un escape room.
Al parecer, una de las víctimas estaba celebrando su cumpleaños en uno de los escape room de su ciudad. Al parecer estaban intentando dar con las respuestas al enigma que abriría la sala cuando se inició un fuego dentro del local que impidió a los cinco jóvenes escapar con vida. Debido a ello, el presidente de Polonia (país donde ocurrió el trágico suceso) ha calificado lo ocurrido como trágico en su perfil social de Twitter, mientras que el ministro del Interior, Joachim Brudzinski, ha declarado que se revisarán las regulaciones en materia de prevención de incendios en este tipo de locales.
Pero, en esencia, las escape room son un juego en grupo practicado en una sala cerrada que cada vez conquista a más aficionados en España en los que cada vez también es más habitual que acudan equipos de empresas, amigos e incluso familias. Por eso, Fran Suárez, responsable de una franquicia de juegos de escape, asegura que son espacios absolutamente seguros: “Aquí no hay nada que pueda resultar peligroso, ni material inflamable ni cosas raras que se pueda imaginar la gente”. Incluso son entornos aptos para las personas con claustrofobia, ya que las habitaciones tienen unas dimensiones de entre 25 y 50 metros cuadrados. Si además se superan los 60 minutos de juego las puertas se abrirán automáticamente. Y cataloga el suceso de Polonia como un mero accidente.