Uno de los elementos más relevantes de la decoración de la vivienda es el color de sus paredes. A la hora de pintar la casa hay que tener en cuenta el tamaño de la misma, ya que debes elegir unos u otros colores en función de si la casa es pequeña o grande.
«El color desempeña un papel clave en las sensaciones que provoca en una casa y en su relación con el entorno. Sirve para enfatizar o disimular características, influye en las formas y los volúmenes, aportando además identidad», informan los profesionales de Julián Lacasa, expertos en reformas integrales y parciales de casas o locales.
El color de las paredes condiciona el resultado al colocar el mobiliario y se define el estilo.
Para que una casa se vea más grande, es aconsejable los colores claros, aunque si quieres elegir tonos más llamativos debes tener en cuenta algunos trucos. En este artículo te explicamos los colores que puedes usar para agrandar visualmente un piso o una casa pequeña.
Blanco
Es un color que da amplitud, luminosidad y orden a las estancias. Además, nunca pasa de moda y puedes combinar el blanco con muebles de madera o con el beis. La habitación blanca se ve más grande, porque los colores blancos pueden llegar a reflejar hasta el 96% de la luz.
Blanco roto
Si no te apetece un blanco puro puedes optar por otras variedades, como el blanco roto. Es una tonalidad idónea para combinar con muebles pintados en tonos grises. Es idóneo para las habitaciones o el salón, porque crea un ambiente relajante.
Blanco grisáceo
Es un blanco manchado con un color frío, es decir, el blanco se mezcla con negro o con azulado. Con esta tonalidad conseguirás agrandar la estancia.
Celeste
Opta por el celeste para algunas estancias, como el dormitorio. Es color que transmite sensación de serenidad y delicadeza.
Rosa palo
El rosa palo también es ideal para los dormitorios. Es una tonalidad que transmite sensación de frescura y puede agrandar casas o pisos pequeños. Combina a la perfección con muebles de color verde o blanco.
Beis
Aporta calidez y crea una estancia elegante. Aporta claridad y serenidad, además, no atrae demasiado la atención. Te recomendamos que combines el beis con un mobiliario marrón, dorado o blanco. ¡Es perfecto para el salón!
Gris
El gris claro aporta luz, calidez y un aire sofisticado. Tienes que tener en cuenta que cuanto más suave sea la tonalidad, más luminosidad y amplitud conseguirás.
Con este color lograrás un estilo desenfadado y relajado. Para no perder nada de luminosidad elige un mobiliario de color blanco. Si quieres usar un gris más intenso debes saber que solo puedes usarlos en estancias luminosas.
Rosa salmón
Este color te ayudará a ampliar la habitación, es idóneo para los dormitorios románticos. Elige una ropa de cama en rosa palo y lograrás un ambiente muy chic.
Verde suave
Si quieres estancias sofisticadas y modernas, apuesta por los tonos empolvados como los verdes, azules o rosas. El color verde en sus tonos menos saturados aporta profundidad y frescura, por lo que hace que una estancia parezca más grande.
El azul
Es un color relajante y transmite sensación de calma. Es perfecto para dormitorios y baños, porque favorece el relax. También puedes optar por un azul grisáceo.
Los colores oscuros
Si quieres apostar por los colores oscuros, pero para conseguir un efecto en profundidad debes pintar el techo de color blanco. Con este truco lograrás que el salón se vea más grande.
Verde salvia
«Otro color que está de moda y que tiene personalidad para decorar es el verde salvia. Y también se suma a la lista de los colores que puedes usar para agrandar un piso pequeño. No es fuerte, pero sí llamativo y usado en una pared en combinación con colores más luminosos puedes dar profundidad», informa la revista ¡HOLA!
Verde grisáceo
Este tono es ideal para agrandar espacios, además, aporta frescura y se adapta a todos los estilos. Combina el verde grisáceo con amarillos suaves y otros verdes.
Rojo
Si quieres usar colores algo más intensos o llamativos, puedes hacerlo pero teniendo en cuenta el siguiente consejo: crea zócalos o contraste con las molduras de las puertas.
Si te encanta el color rojo, pero no sabes si
optar por él, la revista AD informa que «aunque pueda resultar paradójico, una forma de ampliar espacios es apostar por tonos intensos, como un rojo vibrante. Combinado con un techo blanco, por ejemplo, genera una gran sensación de amplitud en la estancia».
Es aconsejable un techo de color blanco, ya que siempre está más en contacto directo con la luz, por lo que percibirás más amplitud y luminosidad.